Una relación es un intervalo de tiempo. Un intervalo. Nada más. No es eterna, quiero creer que las relaciones no son eternas, y que no fallamos, sino cerramos un intervalo. Dura lo que tiene que durar, pero eso si. Siempre es un intervalo abierto, ¿Abierto a qué?, a cambios de longitud, de altura, de profundidad. Pero sobre todo de duración.
Siempre que amé, o quise sencillamente, me gustó decir
SIEMPRE, y es mas, siempre les amé siempre. Pero mi siempre no es tu eterno, mi siempre no es tu “parasiempre”. Mi siempre nunca significo infinito, siempre fue un intervalo. Sabíamos cuando empezaba, levemente, pues no conocíamos, ni conoceremos nunca el segundo exacto en que mi mente o como a ti te gustaría llamarlo “corazón” hizo click o para ti haría pum-pum. He aquí el primer paréntesis.
[ ( ].
Pero en eso estamos de acuerdo. Lo que realmente nos distancia, es el segundo paréntesis
[ ) ]. Tu piensas siempre, que es eterno, o prefieres pensar que así será. Porque es la ilusión que te mueve, el desconocimiento, o la ignorancia de que todo termina, y después te lamentas cuando termina, maldiciendo al destino que tanto imploras para esperanzarte. Pero tus ruegos no tienen frutos y tu ya lo sabes. Porque toda relación está condenada a terminar, yo lo sé, lo planeo, calculo cada probabilidad, peso los pros y los contras en una balanza de sensibilidad infinita, pero no me llames frío, no todavía. No quiero saber si me convienes o si no me convienes. Solo quiero saber, si tu vas a saber aceptar, o si estás preparada para saber como decía Mario que “ nuestro amor fue siempre un niño muerto, un niño muerto, solo eso. Maravilloso y condenado”. Porque si no estás lista, no esta preparada, solo ignoras. Entonces ni siquiera mi esperma fecundara al óvulo de nuestro amor, y no tendremos ni que ostias, ni que niño muerto. Por una sola razón:
Yo no necesito expectativas y esperanzas. Solo alguien dispuesto a sacarle a ese intervalo todos los decimales que podamos, sin dudas, ni pena por lo que tarde o temprano tiene que venir.
¡ Vivan las infinitas divisiones!